jueves, 10 de mayo de 2012

Beñat Etxeberría Urkiaga


El pasado 2 de mayo el Real Betis se enfrentó al eterno rival en el estadio que se encuentra detrás de un centro comercial. Hacía un tiempo que no se jugaba el derby allí y el Betis llegaba sin presión a un partido intersemanal en el que el Sevilla FC apuraba sus últimas opciones de jugar en Europa. Los miembros de la Peña Bética Escocesa nos preparamos y acudimos, como todas las semanas, al Cuckoo's Nest, ese pub edimburgués en el que vemos los partidos del glorioso. Por motivos técnicos no pudimos  ver el partido allí y fuimos a casa de otro bético que vivía cerca para verlo por internet. El caso es que cuando nos pusimos frente al ordenador para ver el partido, ya perdíamos 1-0 y los más pesimistas nos temíamos la llegada del segundo gol en contra, no porque los de blanco estuvieran haciendo un gran partido, sino por nuestra naturaleza de ser capaces de lo mejor y de lo peor.

El caso es que nos reunimos unos 7 u 8 y vimos que el Betis se echaba arriba y buscaba el empate. Minuto 43, falta peligrosa a favor del Betis. Todos dijimos: "Esta es pa Beñat". Y así fue, el vasco se cuadró y empató el partido con uno de esos goles que se dicen "psicológicos". Por cierto, Beñat lleva más goles de falta en esta liga, el año de su debut en primera (no lo olvidemos), que Cristiano Ronaldo y Lionel Messi. En el descanso, los béticos que allí estábamos hacíamos cábalas sobre si meter a Jonathan Pereira y sobre si Jefferson Montero es un pollo sin cabeza o tiene algo de fútbol.

Empezó la segunda parte y, con ella, el ataque de nervios colectivo (bueno, algunos estábamos más nerviosos que otros). Ambos equipos lo intentaban pero nadie marcaba y poco a poco el Betis se iba haciendo con el partido. En el minuto 89, ya con el corazón en un puño, se nos fue la conexión a internet. Imagínense ustedes lo que es eso. Te quedas sin señal a un minuto del final. Como locos nos abalanzamos sobre el ordenador e intentamos arreglarlo. 4 minutos tardamos en recuperar la señal. 4 largos minutos en los que nos iba a dar algo. De repente recuperamos la señal pero solo el audio. Claramente escuchamos el típico "Gooooooooooooooooool, goooooooooooooool, goooool" pero el locutor no decía quién lo había marcado. También escuchábamos mucho ruido de celebración por detrás con lo cual teníamos claro que había sido el quipo de Nervión el que había anotado el tanto y uno de nosotros dijo, "ea, gol del Sevilla, con tanto ruido tiene que ser de ellos" y los demás, cariacontecidos, asentimos ante la evidencia pero con la mínima esperanza de que no fuera así. De repente volvió la imagen y la pantalla nos mostró una piña de jugadores verdiblancos celebrando un gol que hacía mucho tiempo que todos teníamos ganas de marcar. Gritamos, nos abrazamos y nos regocijamos todo lo que puede regocijarse un bético ante tales circunstancias. Luego ya vimos la falta, la expulsión de Medel y por último, la genialidad de un Beñat que entraba en la historia de los derbys colándosela a la barrera por debajo en un gesto que generado ya hasta la creación de unas sevillanas. Es posible que el año que viene Beñat vuelva a su tierra y le valoren como lo que es, un gran jugador de fútbol. Si se queda, mejor que mejor, tenemos futbolista para rato. Si se va, dejará un dinero importante fundamental para la supervivencia  del club. En cualquier caso los béticos ganamos y hay mucho que agradecer a los encargados de la cantera y a Pepe Mel, un bético que se da cuenta de que la cantera no solo es el futuro del Betis, sino el presente y el pasado.

Aquí tienen un resumen del partido por si aún no lo han visto.